Una diosa de la mitología de los esquimales inspiró a Guadalupe Coronado quien, en junio del 2005, abría el restaurante Sedna en un edificio del siglo XIII catalogado por la UNESCO como Patrimonio Artístico del Gótico Catalán, frente al Port Vell y rodeado de edificios y monumentos históricos.
Situado en la parte más antigua de la fachada marítima de Barcelona, el lugar que, según cuentan, fue frecuentado por Miguel Cervantes durante su paso por la ciudad, es una apuesta segura en la zona, atestada de restaurantes para turistas.
Bajo sus arcos góticos, enmarcados por antiguas paredes de piedra, el restaurante nos ofrece una excelente cocina de inspiración mediterránea elaborada con productos frescos de temporada tratados con sumo respeto.
La carta incluye tapas, arroces, pescados y marisco, carnes… que pueden degustarse con alguno de los vinos de la extensa bodega, que ofrece más de 80 referencias.